River se adelantó en la serie con un triunfazo en Córdoba

River logró vencer 1-0 a Talleres en el marco de la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores 2024 en el estadio Mario Alberto Kempes gracias al agónico gol de Paulo Díaz sobre el final del encuentro. Una victoria vital que le permite al Millonario llegar con mayor tranquilidad a la vuelta en el Monumental.

Con más dudas que certezas y con más roce que juego, en la última gran acción de la velada es que el equipo de Marcelo Gallardo logra un trascendental triunfo en la Docta que le permite coquetear con la idea de decir presente en los cuartos de final del máximo torneo a nivel continental. El Millonario no tuvo su mejor noche y todavía se nota que sigue en su intento de amoldarse a la idea de un Muñeco que concretó su regreso hace poco más de un semana, por lo que sufrió de la misma manera en la que lo hacía con Martín Demichelis, en especial por la pelota parada en materia defensiva.

Esos problemas en el funcionamiento también se trasladaron en el juego, al punto que no hizo mella que la T quedase con uno menos después de la brutal patada por la espalda de Lucas Suárez sobre Adam Bareiro a los 14 minutos del complemento.

El punto de inflexión fue la pelota parada aunque en favor del Millonario, y no en su contra como parecía indicar la tónica del encuentro cada nuevo centro del equipo de Ribonetto sobre el área de Franco Armani. Nacho Fernández lanzó un perfecto centro que conectó Paulo Díaz ¡con su hombro! con tal potencia que venció la resistencia de un Guido Herrera que nada pudo hacer pese a que llegó a acariciar la pelota cuando cruzaba la línea de meta. El chileno de esa manera abrió la cuenta y decretó el 1-0 parcial, que menos de diez minutos después se transformó en definitivo.

Con este resultado, el Millonario llega al encuentro de vuelta en el Monumental con una importantísima ventaja que le permite saber que logrará el pasaje a los cuartos de final en caso de ganar o igualar. Por el lado de Talleres, su única alternativa es ganar por la mínima diferencia para forzar una definición por penales o por dos (o más) goles para evitar una tanda desde los doce pasos y quedarse directamente con el pase a la próxima instancia.