Un hombre de 49 años, identificado como Vem Miller y originario de Las Vegas, fue arrestado el sábado por la policía durante un evento electoral de Donald Trump en Coachella, California, tras ser descubierto con una escopeta y una pistola cargada en su poder.
Según la oficina del sheriff del condado de Riverside, los agentes, que se encontraban en un puesto de control cerca del evento, detuvieron a Miller cuando llegaba en una SUV negra. Posteriormente, fue trasladado a un centro de detención local, donde se le acusó de posesión de un arma de fuego cargada y un cargador de alta capacidad.
A pesar de la gravedad del incidente, el sheriff del condado, Chad Bianco, aseguró a Southern California News Group que “este incidente no afectó la seguridad del expresidente Trump ni de los asistentes al evento”. Sin embargo, Bianco advirtió: “Probablemente detuvimos otro intento de asesinato”.
Pase de prensa falsificado
Se reveló que Miller intentó ingresar al acto electoral presentando pases VIP y de prensa falsos, lo que llevó a los agentes a realizar una búsqueda en su vehículo. Durante la revisión, se encontraron las armas y municiones en su poder.
La oficina del sheriff no proporcionó detalles sobre las intenciones de Miller. Tras su detención, fue liberado bajo una fianza de 10,000 dólares, con una audiencia judicial programada para el 2 de enero.
Los antecedentes
Este incidente ha generado preocupación, especialmente a la luz de dos recientes intentos de asesinato contra Trump, quien busca recuperar la presidencia de Estados Unidos y competirá con la demócrata Kamala Harris en las elecciones del 5 de noviembre.
El primer intento ocurrió en un mitin en Butler, Pensilvania, el 13 de julio, donde Thomas Matthew Crooks, de 20 años, hirió a Trump en la oreja antes de ser abatido por el Servicio Secreto. En el mismo evento, el tirador causó la muerte de un asistente y dejó a otros dos heridos. El segundo intento se produjo el 15 de agosto, cuando Ryan Wesley Routh, de 58 años, fue detenido en Florida tras ser encontrado armado cerca del club de golf donde jugaba Trump.
La decisión de Trump de llevar a cabo un acto de campaña en California, un estado históricamente demócrata, sorprendió a analistas políticos, aunque el evento atrajo a una multitud considerable, a pesar de las altas temperaturas que alcanzaron casi los 38 grados.