Central Córdoba a la final de la Copa Argentina y que se rasque al que le pique

Entre los cuatro mejores equipos del torneo federal del fútbol argentino estaba Central Córdoba, digo estaba porque ya es uno de los dos mejores. Anoche eliminó a Huracán y se convirtió en el primer finalista de la Copa Argentina 2024.

Es el único equipo del interior del país que llegó a esta instancia y que se codea con tres grandes como Boca, que a duras penas se metió en semis, como Vélez, el mejor equipo en la actualidad de la Liga, y como Huracán, que también atraviesa un momento.

El Ferroviario tuvo que volver a San Nicolás, recorrer más de 900 kilómetros para jugar la semis y ante el Globo de Parque Patricios que en menos de tres horas ya estaba en el estadio Único. Sin embargo, a pesar de todo ese trajín, sobre todo para los hinchas santiagueños, la historia en Buenos Aires tuvo final feliz.

Feliz para Central Córdoba y para Santiago del Estero que nuevamente tendrá a un representante como en el 2019, donde el mismo Central perdió frente a River.

Pero la historia se repite, el menosprecio cada vez es mayor de los simpatizantes y hasta de periodistas de los clubes de Buenos Aires, que tratan de ningunear a un club que lejos, pero lejos, está institucionalmente mejor y más ordenado que muchos.

El criticar y hasta poner en duda cada paso del Ferroviario en el fútbol argentino, ya es injusto y hasta absurdo. Y ahí me pregunto cuál es el fundamento que los lleva a cuestionar la campaña del equipo dirigido por Omar de De Felippe.

Uno de los que siempre hace campaña en contra, es nada más y nada menos que Caruso Lombardi, que por su pelea constante con los dirigentes de AFA, ataca a Central Córdoba con que es uno de los “más acomodados” del fútbol argentino. Pero que mire un poco para atrás e indique a dónde, cómo y cuándo favorecieron al Ferro, en qué momento fue ayudado por un fallo polémico de un árbitro tanto en la Liga como en la Copa Argentina.

No hay partido o jugada que haya sido escandalosa a favor de Central. Solo dichos que cada vez agiganta el gran momento del Ferro.


No busquen porque en esta Copa no hay, solo miren a esta institución que desde que está en Primera nunca fue noticia por despidos escandalosos, de jugadores que se hayan ido por problemas económicos, o con compras rutilantes.

Es cierto que se quitaron los descensos este año y que el equipo santiagueño era uno de los comprometidos, pero es pan para hoy y hambre para mañana. Los descenso volverán en algún momento y al promedio habrá que engrosarlo de una forma u otra. No se olviden que en esa zona roja también están Banfield, Lanús, Independiente de Rivadavia, Tigre y Sarmiento de Junín.

Central Córdoba es finalista y hasta puede clasificar a la Copa Libertadores, un premio que seguro a muchos les molestará. Por eso…que se rasque al que le pique.

Por Adrián Ortiz.