En un comunicado oficial, el Ejército israelí afirmó que “como cualquier otro país soberano del mundo, el Estado de Israel tiene el derecho y el deber de responder”. Este pronunciamiento se produce tras semanas de creciente tensión en la región, culminando en un ataque aéreo israelí contra Irán en las primeras horas del sábado.
Se reportaron al menos cinco explosiones en áreas cercanas a Teherán, así como en las ciudades de Karaj, Isfahan y Shahdid. Además, se registraron ataques en las capitales de Irak y Siria, Bagdad y Damasco, respectivamente. Según el Ejército israelí, las Fuerzas de Defensa de Israel están llevando a cabo “ataques precisos contra objetivos militares en Irán”.
Este ataque se produce en respuesta al lanzamiento de aproximadamente 180 misiles por parte de Irán hacia territorio israelí el pasado 1 de octubre, en represalia por el asesinato de líderes de grupos terroristas como Hezbollah y Hamas. Israel había advertido que respondería a esta agresión, lo que provocó una fuerte advertencia de Teherán sobre posibles represalias.
Las últimas actualizaciones indican que los ataques israelíes se han centrado en objetivos militares específicos, evitando instalaciones petroleras y sitios relacionados con el programa nuclear, en un esfuerzo por ajustarse a los límites acordados con la Casa Blanca.