La provincia no sale del asombro y escozor. El hallazgo de 35 archivos, con 31 fotografías y 4 videos de abusos sexuales de sus cuatro sobrinos menores, comprometen de sobremanera al peluquero de Quimilí, departamento Moreno, detenido esta semana.
El acusado de 27 años, fue trasladado ayer al edificio del Ministerio Público Fiscal para prestar declaración de imputado, pero esta vez, aconsejado por su abogado, optó por guardar silencio.
Los próximos pasos son las entrevistas a las víctimas en Cámara Gesell por tratarse de menores y pericias psicológicas y psiquiátricas.
La indagatoria se concretó en la Unidad Fiscal de Abuso Sexual y Delitos contra la Integridad Sexual en ciudad capital.
El peluquero estuvo frente a la fiscal Lucas. Allí fue informado sobre las imputaciones: “Abuso sexual con acceso carnal en concurso real de delitos; producción, tenencia y distribución de material de contenido sexual infantil”.
Cabe recordar que su madre también fue apresada en los allanamientos del martes 5 de noviembre.
A diferencia de su hijo, ella enfrenta cargos como “partícipe necesaria” del combo penal citado y atribuido a su hijo. El jueves la mujer declaró que no tiene nada que ver y que jamás haría daño a sus nietos.
Un vocero señaló que todo decantó entre agosto y septiembre. Interpol de Estados Unidos alertó a Buenos Aires sobre los videos de abusos que después se descubrió, correspondían al peluquero de Quimilí.
En menos de una semana, la fiscal Lucas puso manos a la obra y afectó a personal de Trata de Personas, Homicidios y Delitos Complejos y sus pares de la División Delitos Cibernéticos de la Policía Federal en Protección de la Niñez y Adolescencia.
Todos ya habrían remitido informes preliminares. El 16 de septiembre, los federales confirmaron la existencia de 35 archivos con videos y fotos. Sin margen a las dudas, en todos, el joven aparecería abusando al menos de dos sobrinos.
Investigación
La incipiente investigación sostiene también que una de las víctimas habría sido atacada sexualmente entre los 11 y 14 años.
Desde esa realidad judicial, muy cuesta arriba, la defensa aconsejó ayer al peluquero abstenerse de declarar, principalmente porque desconoce el resto de pruebas que pueden llevarlo indefectiblemente hacia la temida prisión preventiva, quizá antes que la prórroga de detención.
Una alta fuente policial indicó que el peluquero de Quimilí dejó entrever que su prioridad hoy es su madre. Es decir, los esfuerzos de la defensa se centrarían en procurar una domiciliaria y después falta de mérito para la mamá.
