Vélez recibió a Lanús en el José Amalfitani con la misión de ganar para agrandar la distancia de sus principales perseguidores en la cima del campeonato, pero no pudo pasar del empate y el torneo está al rojo vivo.
El partido comenzó con una carga nerviosa muy notoria. Las irregularidades del campo de juego a causa de los recitales complicó la precisión de los intérpretes y antes del primer cuarto de hora Francisco Pizzini sintió la primera molestia física en uno de sus tobillos que generó un manto de preocupación colectiva.
Mientras tanto, el Fortín continuaba apostando por la pelota parada a cargo de Claudio Aquino y la potencia ofensiva de Braian Romero.
El Granate, en cambio, se las ingeniaba para generar dificultades a la última línea local con la perseverancia de Walter Bou y la presión constante de Marcelino Moreno, Lautaro Acosta y Eduardo Salvio.
Sobre la media hora, el combinado de Liniers generó la ocasión más clara para abrir el marcador, pero un milagro salvó al equipo de Ricardo Zielinski.
Los centros de Aquino y Bouzat hicieron revolcar a Nahuel Losada, quien a puro manotazo intentó desactivar el peligro.
Sin embargo, en uno de sus despejes, la pelota le quedó a Valentín Gómez y el central abrió el secador para buscar con toda su categoría el palo más lejano del arquero. Sólo por la heroica reacción de Leonardo Jara, el dueño de casa no se puso en ventaja.
Unos instantes más tarde, otra vez el ex Independiente volvió a despertar emociones en Villa Luro. Fue a través de un tiro libre peligroso que se elevó por encima de la barrera y rebotó contra el travesaño.
Roja
La expulsión de Damián Fernández, a instancias del VAR, por una violenta infracción sobre el Laucha Acosta cambió el destino del pleito para el complemento.
Con superioridad numérica, Lanús tomó una postura más agresiva en la reanudación del choque y llevó el compromiso a la zona defendida por Tomás Marchiori.
A pesar de las adversidades, Vélez se las ingenió para provocar acciones que se llenaron de polémicas.
La sociedad conformada por Romero y Aquino fue una pesadilla para la defensa de Lanús. Y en una de las paredes que construyeron en el área rival, el ex volante de Independiente cayó por un presunto toque del Cali Izquierdoz y el reclamo masivo por el penal fue ignorado por Echenique y Germán Delfino, quien siguió el partido a través de los monitores del VAR.
A pesar de haber jugado todo el segundo tiempo con diez, la repartición de puntos no conformó en Vélez. Y la lucha por el título está cada vez más caliente.