YPF y Shell exportarán el gas licuado de Vaca Muerta, en un acuerdo por US$ 140.000 millones

Las petroleras YPF y Shell anunciarán en las próximas horas la firma de un memorándum de entendimiento (MOU) para desarrollar el Gas Natural Licuado (GNL) en la Argentina, a partir del combustible de Vaca Muerta. El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, viajó a los Países Bajos para cerrar los últimos detalles en una reunión con el Directorio de la empresa angloholandesa.

El acuerdo comercial a 20 años establecerá exportaciones de unos 10 millones de toneladas por año (MTPA) de LNG -tal la sigla de Liquified Natural Gas en inglés-, equivalentes a unos 40 millones de m3 por día (MMm3/d) de gas natural metano en estado gaseoso, que es hoy aproximadamente el 30% de la producción nacional.

Las ventas de gas licuado al mundo empezarán entre 2027 y 2028, y generarán unos 7.000 millones de dólares por año, o un total de US$ 140.000 millones en todo el período. Una vez que se tome la decisión final de inversión (FID), en 2025 las empresas participantes pedirán el ingreso al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), para obtener estabilidad fiscal, pagar menos impuestos y poder acceder libremente a los dólares producidos.

Toda la operatoria, en esta etapa, se hará a través de dos barcos de licuefacción de gas -que enfrían el combustible a 161 grados bajo cero para comprimir 600 veces su volumen y facilitar su transporte por buques carriers en los mares- que se instalarán en el Golfo San Matías, en la provincia de Río Negro.

La angloholandesa Shell, una de las “supermajor” (petroleras gigantes a nivel mundial), proveerá conocimiento técnico (know how) y demanda -será el “offtaker”-. Así, reemplazaría el rol de la malaya Petronas, cuya salida del proyecto todavía no está definida pero es bastante probable.

Con contratos de abastecimiento a largo plazo, YPF podrá buscar financiamiento de bancos internacionales y fondos de inversión bajo un modelo de “Project Finance”, en donde el riesgo es del proyecto y no de la empresa o del país en sí.

La firma en donde el Estado nacional tiene el 51% de las acciones también participará el proyecto Argentina LNG a otras productoras de gas, como Pan American Energy (PAE), Pampa Energía y Tecpetrol, entre otras.

Para lograr vender el gas de Vaca Muerta al mundo se necesitará la construcción de gasoductos “dedicados” plenamente a la exportación, con una extensión mayor a los 400 kilómetros entre la roca madre del shale gas en Neuquén y las costas rionegrinas en el Océano Atlántico.

Por el momento, el MOU no prevé la construcción de una planta en tierra (onshore) de licuefacción de gas, que representaría hundir inversiones muy importantes con mayores riesgos asociados. Los barcos, en cambio, tienen mayor flexibilidad económica.

YPF acaba de comprar esta semana a la multinacional estadounidense ExxonMobil el campo Sierra Chata por unos 300 millones de dólares. Ese yacimiento tiene una producción de 4 millones de m3 diarios de gas natural, que irían al gas licuado.

El directorio de Shell se había reunido hace unas semanas con el presidente Javier Milei y le anticipó la decisión. Hace una semana el Gobierno anunció beneficios para las petroleras multinacionales: podrán sacar los dólares de la Argentina en los proyectos de Vaca Muerta que ya maduraron, a partir de la flexibilización del cepo que establece el Decreto 929/2013

Mientras tanto, un proyecto que está algo más avanzado es el de Southern Energy, la sociedad conformada por PAE y la noruega Golar LNG, que exportará a partir de 2027 unos 2,45 millones de toneladas anuales de gas licuado, con el combustible de PAE, Pampa Energía y la petrolera británica Harbour Energy.

El barco Hilli Episeyo tomará el gas de la Cuenca Austral, principalmente de los yacimientos que están en el medio del mar -offshore- y venderá el combustible al mundo -posiblemente a Brasil- durante los meses de verano. La intención, con distintos acuerdos, es que esas exportaciones se concreten durante todo el año.