Un trágico episodio sacudió la ciudad brasileña de Torres, donde Deise Moura dos Anjos fue detenida bajo la acusación de haber envenenado a tres familiares con arsénico, que presuntamente colocó en una torta consumida durante la cena de Navidad.
Las víctimas fatales son Maida Berenice Flores da Silva, de 58 años; Tatiana Denize Silva dos Santos, de 43; y Neuza Denize Silva dos Anjos, de 65, madre de Tatiana y hermana de Maida. Además, tres personas más, incluida la suegra de Deise (quien preparó la torta), un hombre y un niño de 10 años, resultaron intoxicados, aunque se encuentran estables.
La directora del Instituto General de Expertos, Marguet Mittman, confirmó que las autopsias revelaron concentraciones de arsénico extremadamente altas en las víctimas. “Para que se entienda, 35 microgramos son suficientes para causar la muerte. En una de las víctimas, la concentración era 350 veces mayor”, detalló Mittman.
Las investigaciones señalan que Deise habría adulterado la harina utilizada por su suegra al preparar el pastel. Según el delegado Marcus Vinícius Veloso, los testimonios coinciden en que el postre tenía un sabor inusual: “Desde los primeros bocados, el pastel tenía un gusto picante y desagradable. El niño de 10 años, al probarlo, incluso lo apartó diciendo: ‘Ahora ya nadie lo come’. Poco después, los presentes comenzaron a sentirse mal”.
Las sospechas sobre Deise también crecieron debido a un incidente previo: meses antes, su expareja falleció por una supuesta intoxicación alimentaria, un caso inicialmente considerado como muerte natural, pero que ahora fue reabierto.
Además, el análisis de su teléfono reveló búsquedas en internet relacionadas con el arsénico, incluidas consultas en Google Shopping.
Deise Moura dos Anjos permanece detenida en la Prisión de Mujeres del Estado de Torres, enfrentando cargos por triple homicidio doblemente calificado (por motivos fútiles y uso de veneno) y triple intento de asesinato. Las pruebas contra ella son contundentes, según la Fiscalía.
El caso ha generado conmoción en la comunidad, mientras las autoridades continúan reuniendo pruebas para esclarecer el macabro crimen.