Emilia Pérez ha dividido opiniones desde su estreno. La película del francés Jacques Audiard, ambientada en México, aborda temas como el narcotráfico y las desapariciones forzadas, pero la comunidad latinoamericana ha señalado que Audiard no realizó ninguna investigación sobre el país para desarrollar su historia.
El propio director aclaró que esta decisión fue intencional, lo que desató críticas de mexicanos sobre la autenticidad de su visión. Si bien se espera la opinión de referentes cinematográficos de la región, el primero que se animó a hablar en contra fue Rodrigo Prieto con Deadline.
El director de Pedro Páramo expresó su descontento con la falta de autenticidad cultural y la ausencia de mayor participación mexicana en la producción: “En primer lugar, no me gusta que la película no se haya rodado en México. En segundo lugar, ¿por qué no incluir a más mexicanos para que participen en la producción?”, señaló Prieto.
El cineasta destacó la actuación de Adriana Paz como un punto positivo, calificándola como “un soplo de aire fresco” y una representación auténtica, Prieto criticó que el resto de la película carezca de una conexión genuina con la cultura y problemática social del país.
“Todo es completamente falso. No me refiero al aspecto musical, que creo que es genial. Esa es una gran idea. Pero, ¿por qué no contratar a un diseñador de producción mexicano, un diseñador de vestuario o al menos algunos consultores? Sí, tenían entrenadores de diálogo, pero me ofendió que una historia así se retratara de una manera que pareciera tan poco auténtica”, expresó.
Prieto subrayó errores básicos en la película, como un cartel en una cárcel que decía “Cárcel” en lugar de “Penitenciaría”, lo que para él evidencia una falta de conocimiento y cuidado por parte de la producción.
“Son solo los detalles, y eso me demuestra que nadie involucrado sabía lo que hacía. Y ni siquiera importaba. Eso fue muy preocupante para mí”, añadió.
La periodista Joanna Vega-Biestro también se sumó a las críticas y explicó que el largometraje tiene fallas a todos los niveles, empezando por el guion: “No sé si el director, como muchos dicen, se metió a Google, hizo el guion en francés y dijo ‘vamos a traducirlo con Google’”, cuestionó la periodista, quien consideró que el reconocimiento que Emilia Pérez ha tenido con la prensa especializada se debe a que quienes integran los comités, también desconocen las temáticas que pretende abordar el largometraje.
“La Academia y todos los que entregan premios tampoco saben la cultura de este país, ni conocen la información que hay sobre los desaparecidos. Para muchos, esta película es una burla para los desaparecidos. Ya veremos lo que dice Karla Sofía cuando venga”, dijo Vega-Biestro.