El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a ocupar el centro de la escena política internacional con su discurso en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza. En una intervención marcada por fuertes críticas, promesas de cambio y llamados a la paz, el líder republicano hizo un contundente reclamo: “Es momento de detener la masacre entre rusos y ucranianos”, en referencia al conflicto que ha desestabilizado la región y generado preocupación global.
Trump aseguró que, bajo su eventual administración, el mundo experimentará “mayor paz y prosperidad” y destacó que Estados Unidos tiene el deber de liderar con determinación en tiempos de crisis.
Las principales declaraciones de Donald Trump en Davos
Durante su discurso, Trump dejó una serie de frases polémicas y cargadas de promesas:
“Fue una semana histórica en Estados Unidos, volvimos a la época dorada de América.”
“Todo el planeta tendrá mayor paz y prosperidad.”
“Mi gobierno llega en un momento lleno de desastres.”
“Joe Biden perdió el control de todo lo honorable para el país.”
“Necesitamos corregir políticas izquierdistas que terminaron en calamidad.”
“Desde ahora solo habrá dos géneros, masculino y femenino. El sentido común vuelve a Estados Unidos.”
“Desde hace décadas no tenemos confianza económica, pero mi elección generó un gran optimismo.”
“Debemos detener las entradas ilegales a Estados Unidos; no debemos permitir que nuestro país sea invadido.”
“Vamos a hacer que nuestro país sea más fuerte.”
El discurso de Trump no solo incluyó críticas al presidente Joe Biden, a quien acusó de llevar al país al caos, sino que también hizo hincapié en cuestiones sociales, económicas y de seguridad.
El llamado a la paz en el conflicto entre Rusia y Ucrania fue uno de los puntos más destacados de su intervención, aunque no se detallaron estrategias específicas para abordar la situación. La propuesta de Trump se suma a una creciente presión internacional por buscar una solución diplomática al conflicto.
Con estas declaraciones, el presidente dejó claro que sigue buscando posicionarse como una figura clave en la política global, mientras su retórica genera divisiones y reacciones tanto en Estados Unidos como en el extranjero.
