La Casa Rosada busca reemplazar al procurador del Tesoro Rodolfo Barra y ya tiene un candidato en mente

El Ejecutivo apunta a desplazar al procurador general del Tesoro, Rodolfo Barra, tras cuestionar un dictamen favorable a una empleada que recibía un incentivo salarial a través de ACARA. Además, critican sus presuntos viajes al exterior. “Tenemos indicios de que vive fuera del país”, afirmaron desde Nación.

En Balcarce 50 analizan pedirle la renuncia y ya circula el nombre de Ricardo Rojas, exjuez en lo criminal de Buenos Aires, como posible reemplazo. “El presidente lo valora mucho”, señaló un funcionario.

Barra fue convocado por el asesor presidencial Santiago Caputo a una reunión este lunes a las 19 en la Casa Rosada. “No hay nada cerrado aún; la decisión final la tomará el presidente. Es probable que se le pida la renuncia”, comentaron fuentes oficiales.

Desde el entorno de Barra califican las acusaciones como “operaciones” y aseguraron desconocer los motivos de los cuestionamientos. Por ahora, el funcionario ha decidido no emitir declaraciones hasta reunirse con el Ejecutivo.

La Casa Rosada considera que el dictamen de Barra contradice los lineamientos de la gestión y reafirma su intención de remover a funcionarios que no estén “en sintonía con las ideas del presidente”. Este criterio ya motivó la salida de Ignacio Yaccobuci, extitular de la Unidad de Información Financiera (UIF).

“Su resolución va en contra de nuestra política de reducir el Estado y optimizar los recursos. Si no defiende la gestión, no puede continuar en el Ejecutivo”, explicaron desde Balcarce 50. Según trascendió, las diferencias entre Barra y el Ejecutivo se arrastran desde hace un año.

Por su parte, Rojas, abogado por la UBA y exjuez de Cámara, aún no recibió una oferta formal, aunque tiene una relación cercana e ideológica con el presidente. Autor del libro La inflación como delito, su obra inspiró un proyecto oficial para sancionar a quienes promuevan déficits presupuestarios o habiliten la emisión monetaria.

Con una carrera destacada, Rojas trabajó como secretario letrado de la Corte Suprema (1986-1993) y fue juez de Cámara en tribunales orales en lo criminal hasta 2011. Su perfil técnico y afinidad con el presidente lo posicionan como el principal candidato para el puesto.