Por primera vez , Axel Kicillof se refirió al salvaje asesinato de Kim Gómez, la niña de 7 años que murió cuando dos delincuentes intentaban robarse un auto. El gobernador de Buenos Aires afirmó que se está usando el caso de manera “política”, pero que están dispuestos a “discutir” nuevas leyes. A su vez, afirmó que habían apresado a uno de los asesinos y que lo liberaron.
“Lamento mucho la bajeza que he visto estos días. Sé que hay campaña electoral, sé que algunos usan esto para ganar un voto y lucrar con el dolor, sacar ventaja. Se han traspasado todos los límites. Algunos dirigentes políticos los hemos visto hacer cosas que no son política, son miserables”, sostuvo en una clara referencia a los dirigentes de la oposición.
Ratificó que “no todo vale por un voto”. “Hay límites, pero no era la situación actual. Entre las redes y declaraciones no calma ni pacífica ni acompaña a las familias”, consideró.
Acerca del crimen en específico, Kicillof dijo que “la primera respuesta que tiene que haber es un acompañamiento del Estado para que haya claridad”. “Desde el primer momento que apresamos a los delincuentes, el área de Justicia está acompañando a las familias por el dolor”, manifestó.
“Yo no nombro jueces”
El mandatario provincial planteó que en el tratamiento del caso se dijeron “varias mentiras” sobre la edad de imputabilidad de los delincuentes. Afirmó que “el principal responsable de 17 años no es un tema. Desde los 16 se pueden aplicar penas”.
Asimismo, se abrió al diálogo con el Gobierno nacional al asegurar que están “dispuestos a discutir, a mejorar cualquier ley”, y recordó que “son leyes nacionales”. No obstante, planteó que aún teniendo la mejor ley, el problema es si se aplica mal”.
“Yo no nombro jueces ni pongo preso a nadie ni hago las leyes. Ya lo habíamos apresado en febrero y lo liberaron. Es un caso para discutir de la aplicación de la ley”, manifestó en una clara alusión a la designación de Ariel Lijo como para completar la Corte Suprema por decreto.
