
El 5 de marzo marca el inicio del tiempo de Cuaresma, un período de reflexión y penitencia para los cristianos, que invita a la conversión y a la realización de obras de caridad. En el Santuario de Nuestro Señor de los Milagros de Mailín, el Diácono Ramón Silva, al reflexionar sobre este tiempo litúrgico, destacó el mensaje del Papa Francisco para este año Jubilar, que convoca a los fieles a “caminar con los demás”.
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“El Papa nos invita a reconocer nuestra vida en los ámbitos comunes, como la familia, el trabajo y las comunidades cristianas de las cuales formamos parte. Nos desafía a preguntarnos si estamos cerrados o abiertos a ‘caminar con el otro’, reconociendo sus necesidades”, señaló Silva.
El Diácono destacó que la Cuaresma representa una oportunidad única para realizar obras de caridad concretas y acercarse a los demás. “Visitar a un enfermo, a un familiar o vecino, o incluso acercarme a alguien con quien no hablo hace mucho tiempo, son ejemplos sencillos pero poderosos de caridad”, agregó.
Durante esta Cuaresma, los feligreses son llamados a poner en práctica estos actos de generosidad y amor al prójimo, reforzando el vínculo con Dios y con aquellos que nos rodean. Según Silva, “son infinitas las obras de caridad que se pueden realizar para acompañar a Jesús y fortalecer nuestra fe”.