
La Corte Suprema de Justicia de la Nación rechazó la licencia extraordinaria que pidió Ariel Lijo. El juez que había sido designado por decreto por el presidente, Javier Milei ahora deberá renunciar como juez federal para poder asumir en el máximo tribunal. Un paso que no dará hasta tener la aprobación en el Senado.
La novedad de la decisión de la Corte es que el flamante cortesano Manuel García Mansilla votó en contra de los intereses de la Casa Rosada. Mansilla, quien ya asumió es el otro juez designado por decreto por el Ejecutivo.
Pese a lo que se había especulado, García Mansilla decidió votar en contra de la licencia de Lijo, una semana después de su asunción. Este voto representa un golpe para Santiago Caputo, el ideólogo de su llegada a la Corte como el propio juez admitió durante la audiencia en el Senado.
El asesor estrella, denunciado por Facundo Manes tras los hechos violentos que se vivieron en el Senado, había intentado mostrar su influencia mandando a su mano derecha Sebastián Amerio a la asunción. Pero su debilitado poder sufrió un nuevo embate con esta “jugada” que no vio venir.
Otro derrotado con esta votación es Lorenzetti, que volvió a votar en soledad como desde hace tiempo. El rafaelino es el principal promotor de la llegada de Lijo a la Corte y había convencido a los operadores del gobierno que podría formar una nueva mayoría junto a García Mansilla.