El menor de los Márquez tuvo sensaciones positivas en el Gran Premio de Argentina, cerrando la primera jornada de entrenamientos libres cerca de su hermano Marc Márquez, quien lideró la sesión.
Tras la última práctica libre previa a la clasificación, Álex aseguró que “fue un buena. La pista estaba complicada, muy sucia y con algunos parches de agua, pero logramos trabajar bien y encontrar un buen ritmo. Estamos en el buen camino“.
“La clave es ser constante. No buscamos un tiempo rápido desde el principio, sino trabajar en la configuración de la moto y entender cómo se comportaba en estas condiciones. Creo que lo logramos”, explicó Álex.
El piloto de Gresini Racing prefirió no enfocarse en la comparación con su hermano: “Marc es un referente para mí, pero no me obsesiono con estar delante o detrás de él. Cada uno tiene su camino y su forma de trabajar. Lo importante es seguir mejorando”.
“Este circuito siempre es complicado. La pista no estaba en las mejores condiciones, pero eso nos ayudó a probar cosas nuevas y ver cómo reacciona la moto en situaciones difíciles. Creo que eso nos dará ventaja”, dijo Álex.
“Tenemos que seguir trabajando en la configuración. El objetivo es estar en las primeras filas y luchar por una buena posición en la carrera”, concluyó el piloto.
