El juicio por la muerte de Diego Maradona avanza en el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro, con una nueva audiencia que promete revelar detalles cruciales sobre las circunstancias en las que falleció el ídolo del fútbol argentino. En esta jornada, la Fiscalía—a cargo de Patricio Ferrari y Cosme Iribarren—ha convocado a declarar a cuatro testigos, dos de los cuales ya han sido confirmados.
Entre los testigos citados se encuentra Colin Campbell Irigoyen, médico y vecino de Maradona, quien fue el primero en asistirlo aquel 25 de noviembre de 2020. Según su testimonio previo, cuando llegó a la casa, el Diez ya llevaba varias horas sin vida, lo que podría reforzar la teoría de que no recibió la atención médica adecuada. También prestará declaración Juan Carlos Pinto, otro profesional que acudió a la vivienda en una ambulancia y fue el encargado de constatar oficialmente la muerte del astro argentino.
La Fiscalía sostiene que estos testimonios son fundamentales para la causa, ya que ambos médicos fueron testigos directos de la escena y su declaración podría complicar la situación de los siete imputados. Entre los acusados se encuentran el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, el enfermero Ricardo Almirón y su jefe Mariano Perroni, el médico clínico Pedro Di Spagna, y la coordinadora de la empresa de salud Nancy Forlini.
La defensa de los imputados, en tanto, se mantiene en su postura de que no hubo negligencia médica, argumentando que Maradona recibía el tratamiento indicado y que su estado de salud ya era crítico. Sin embargo, los fiscales confían en que las declaraciones de los testigos citados refuercen la hipótesis de que el equipo médico actuó con desidia y no le brindó los cuidados necesarios, lo que derivó en su fallecimiento.
Este nuevo capítulo del juicio marca un punto de inflexión en la causa, ya que podría definir la responsabilidad de los acusados y el desenlace de uno de los procesos judiciales más trascendentes en la historia del país.
