
El hecho causó consternación en la familia. El pequeño había nacido prematuro, y los médicos les dijeron que nada podían hacer, por lo que llevaron el cuerpo a la morgue. Pero grande fue la sorpresa cuando el recién nacido comenzó a mostrar indicios de vida.
Ocurrió en Las Heras, provincia de Santa Cruz. Los doctores ya habían firmado el acta de defunción del menor de 28 semanas de gestación. Su madre pidió despedirse de él, y estando en la morgue se dieron con el infortunio.
Maira Victoria, una joven de 28 años, dio a luz a su hijo Ángel con solo 28 semanas de gestación. Minutos después del parto, el bebé sufrió un paro cardíaco y fue atendido de urgencia por los médicos del hospital local.
Los médicos intentaron reanimarlo, pero tras no detectar signos vitales, lo declararon muerto. El bebé fue llevado a la morgue, sin realizar más pruebas, pero cuando las abuelas del recién nacido quisieron verlo, notaron que aún respiraba.
Tras el descubrimiento, Ángel fue trasladado de inmediato al Hospital Zonal de Caleta Olivia, donde permanece internado en el área de neonatología en estado grave.
Sus padres, Maira y Brian, solicitaron ayuda para cubrir los gastos médicos y el traslado hacia Caleta Olivia, donde el bebé recibe tratamiento especializado.