Elías Piccirillo, marido de Jésica Cirio continúa detenido acusado de estafa y de armar una causa en contra de Francisco Hauque y su pareja. Este jueves, Iván Carlos Helguero, jefe de la división de la Policía de CABA, declaró en calidad de arrepentido y los detalles hundirían al financista.
De acuerdo a sus declaraciones “ya sabían que se iban a encontrar dos paquetes con estupefacientes y una pistola”. Esto en referencia al operativo que habría sido orquestado por Piccirillo.
Rolando Barbano, periodista de policiales reveló en LUZU cómo era el circuito delictivo que terminó con el marido de la mediática tras las rejas. “Él era un joven que hace 10 años vivía en Florencio Varela”, recordó.
Aseguró que es “un millonario súbito”. Inició su carrera en el mundo de las finanzas en la reconocida inmobiliaria presente en todo el país (también sospechada de ser una estafa piramidal). “Lo denunciaron por vender dos veces la misma casa”, reveló.
Eso le permitió conocer a Hauque, con quien comenzó a hacer negocios financieros. “Es el que le da los 6 millones de dólares, pero el año pasado esa cadena de corta. Cuando en enero lo apura a Piccirillo para que le devuelva el dinero, firman un compromiso de devolución en una escribanía”.
En ese momento, Elías organiza una cena en la que iría Jésica Cirio (quien finalmente no aparece), e invita a su socio y su esposa. El traslado al palacio donde se realizó la cena fue en la camioneta de Hauque, pero llamó la atención que Piccirillo prefiera ir atrás, mientras iban a buscar a la esposa del socio.
“Picirillo llega, se sienta en el asiento de atrás sube la mujer, van los tres, en la cena dice que Jésica está demorada, ella no aparece”, continúa Barbano. Una vez que finaliza la cena, Piccirillo se queda en el lugar pese a la insistencia de su socio de acercarlo hasta su casa.
Cuando ellos hicieron una cuadra, rumbo a su casa, los frena la Policía de la Ciudad. “Le dicen que estaba cometiendo violencia de género, le revisan el asiento, por debajo del asiento le encuentran cocaína y una pistola, los bajan del auto y ahí ella grita que fue Picirillo. Van presos a Hauque y a su esposa”, relata el periodista.
La jueza cree en la versión del prestamista y su esposa, y dispone que se investigue a la Policía. Es ahí cuando descubren un entramado aún más oscuro. “Determinan que era una trampa que había ideado Picirillo con un custodio suyo, que contrataron a policías de la Ciudad. Él tenía a un comisario retirado de la policía de la federal al ue habían echado por cometer delitos”, continúa.
Ahora, es este policía el que decidió declarar en calidad de arrepentido, y si se comprueban sus dichos Piccirillo podría ser trasladado a la Cárcel de Ezeiza.
