
Los ciberdelincuentes utilizan diversas tácticas para obtener información personal y financiera a través de correos electrónicos, mensajes y llamadas fraudulentas. Para reducir el riesgo de ser víctima de una estafa virtual, especialistas recomiendan medidas de seguridad básicas.
Uno de los principales métodos de ataque consiste en el envío de enlaces maliciosos que pueden contener virus o programas diseñados para robar datos. Por este motivo, se aconseja verificar la autenticidad del remitente antes de abrir archivos adjuntos o ingresar a sitios desconocidos.
El uso de contraseñas seguras y únicas para cada cuenta en línea también resulta fundamental. Se recomienda combinar letras, números y caracteres especiales, además de activar la autenticación en dos pasos siempre que sea posible. Mantener actualizados los programas y dispositivos contribuye a cerrar vulnerabilidades que los atacantes pueden explotar.
Pautas para evitar fraudes virtuales
- No compartir información personal con desconocidos.
- No ingresar datos en enlaces o formularios sospechosos.
- No proporcionar información sobre el DNI, nombres de familiares o claves bancarias.
Además, se sugiere verificar la autenticidad de cuentas en redes sociales y direcciones de correo electrónico antes de responder. Ante un intento de fraude, especialistas aconsejan cortar la comunicación de inmediato.
Los usuarios deben desconfiar de ofertas llamativas o promociones inusualmente ventajosas, ya que podrían tratarse de engaños. Antes de realizar compras en línea, es recomendable investigar la reputación del sitio web y asegurarse de que disponga de medidas de seguridad adecuadas.