El periodista y analista político, Álvaro Aurane se refirió a la renuncia de Manuel García Mansilla a la Corte Suprema de Justicia. El magistrado había sido designado por decreto junto con Ariel Lijo el pasado 27 de febrero. Sin embargo, el Senado rechazó los pliegos de su nombramiento y decidió dar un paso al costado.
“Triste, solitario y final es la síntesis de la renuncia de García Mansilla”, expresó parafraseando el título de la novela de Osvaldo Soriano. “Cuando a los gobiernos no les interesa la calidad institucional del sistema republicano, la Argentina entra en una dinámica de que siempre se puede estar peor”, explicó.
“Nosotros pasamos de tener jueces designados por decreto en la Corte, al margen del consenso democrático de los dos tercios del Senado de la Nación, donde están representadas todas las provincias al hecho gravísimo de tener una Corte Suprema con miembros que han sido rechazados por el Senado”, agregó.
Dijo que la renuncia del cortesano designado por Milei modifica el panorama. “Nos estábamos encaminando hacia un verdadero conflicto de poderes y rescato esto porque el gobierno le insistía que se mantenga en la Corte, porque decían que la designación por decreto le daba vigencia mientras dure el año parlamentario, pero García Mansilla entiende que esto no puede ser posible”, sostuvo.
“Ni hablar de Lijo que ni asumió en la Corte, sobre todo porque a despecho del discurso anticasta de Javier Milei, Lijo encarna los jueces de la casta”, continuó. En esa línea remarcó que “para que la democracia funcione tiene que primar el constitucionalismo”.
