El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, firmó el decreto que establece el 7 de septiembre como fecha para las elecciones legislativas provinciales. En paralelo, informó que enviará a la Legislatura un proyecto para suspender las elecciones primarias (PASO) en el distrito.
La decisión fue anunciada durante una conferencia de prensa en la que el mandatario explicó los fundamentos técnicos y logísticos que lo llevaron a fijar una fecha distinta a la establecida para las elecciones nacionales, que se celebrarán el 26 de octubre.
Kicillof sostuvo que la aplicación de la Boleta Única por parte del gobierno nacional tornó inviable la simultaneidad de comicios, al requerir el uso de dos urnas y dos sistemas diferentes de votación. Según detalló, estudios y simulaciones encargadas por su administración determinaron que ese procedimiento demandaría, en promedio, cuatro minutos por votante, lo que pondría en riesgo la posibilidad de que todas las personas habilitadas puedan emitir su voto durante la jornada electoral.
“La única manera de asegurar que todos puedan votar de manera simple es hacerlo en dos días diferentes”, expresó. Aseguró que, en el territorio bonaerense, resulta inviable duplicar la cantidad de mesas o ampliar los lugares de votación, como propusieron sectores internos del oficialismo.
Durante su exposición, Kicillof reiteró que la medida no implica un alejamiento del proyecto político nacional y remarcó que continuará impulsando la unidad del peronismo. “Vamos a seguir trabajando por un frente lo más amplio posible que represente a todos aquellos que están sufriendo estas políticas”, señaló en referencia al gobierno de Javier Milei.
El gobernador también mencionó que la mayoría de los mandatarios provinciales optaron por desdoblar sus comicios y que varios intendentes bonaerenses solicitaron lo mismo. “No estamos inventando nada”, concluyó.
