Miguel Ángel Bergoglio, primo del papa Francisco: “Era bien porfiadito; decía que iba a ir a tal parte y se iba”

La última vez que Miguel Ángel Bergoglio conversó con Jorge Mario, su primo, fue en la Catedral Basílica de Santiago del Estero. Por entonces, a quien la iglesia nombró Papa en 2013, era cardenal y sus tareas pastorales lo traían por estas tierras a dejar sus huellas.

Recuerda de ese entonces un diálogo que sacaba a la luz la personalidad más chabacana y descontracturada de Francisco. “‘¿Qué carajo haces vos en Santiago del Estero si sos cordobés?’ Y yo le contesté igual. Lo mismo digo yo de usted, monseñor… Y me dice: ‘bueno, yo por razones laborales’ y le digo que también yo estaba en Santiago por razones laborales”, recordaba el pariente que en ese momento estaba haciendo una residencia.

“Escuché en la radio del auto, que él estaba en la Catedral, entonces mi señora me dijo: ‘anda, visítalo, porque a lo mejor después no lo puedes ver más’. Y ahí estuve, ahí estuvimos conversando un largo rato”, contó a INFO DEL ESTERO de la última vez que pudo verlo. Conmovido por el fallecimiento del Santo Padre, destaca “que ha hecho muchas cosas por todo el mundo; mejor dicho: ha hecho muchas cosas buenas por todas partes”, expresó.

Eso no era una sorpresa para él. Sí lo fue el día en que Francisco decidió visitar la favela en Brasil en julio 2013, su primera visita internacional. “Entró ahí, donde están todos los mafiosos. Nadie lo dejaba, pero él entró solo, porque era bien porfiadito. Se encaprichaba con que iba a ir a tal parte y se iba”, comentó no cómo una crítica, sino como un elogio a sus convicciones, incluso por fuera del protocolo.

El primo de Francisco señaló que para todos fue “algo muy grande” que la Iglesia lo nombrara Papa, porque Latinoamérica no siempre es considerada en los distintos órdenes del mundo. “Nunca se había pensado que iba a haber un Papa argentino”, recordó. Más de una década después, se sabe que su liderazgo católico perdurará por mucho tiempo.

Papa Francisco en la JMJ 2013