La salud del expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro sufre un deterioro significativo, de acuerdo a los médicos que lo asisten en un hospital de Brasilia. El exmandatario fue operado de los intestinos a mediados de este mes y ahora tuvo una alteración en su presión arterial, a la vez que empeoraron los resultados de los exámenes hepáticos.
De acuerdo al parte médico emitido por su equipo de salud, “presenta empeoramiento clínico, hipertensión arterial y un empeoramiento en las pruebas hepáticas“. Es por esto que será sometido a nuevos estudios de imagen para evaluar con mayor precisión su estado actual.
Ante la gravedad de su cuadro, el equipo médico ratificó el consejo de evitar las visitas. “No hay pronóstico para su alta de la UCI“, manifestaron y añadieron que continuará con “fisioterapia motora” y con las “medidas para prevenir la trombosis venosa”.
Mientras tanto, Bolsonaro recibió una citación judicial por orden del juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes al respecto del delito de golpe de Estado por el que es investigado, en relación a los ataques a las instituciones en enero de 2023, respondiendo visiblemente contrariado.
