
Este viernes, la Policía de la Provincia logró desarticular una red que traficaba motos. Según trascendió, los involucrados pertenecen a una banda que robaba vehículos, los desarmaba y enviaba por partes hacia el interior de nuestra provincia para rearmarlos y comercializarlos
El operativo fue ejecutado de manera conjunta entre la División Sustracción de Automotores de Dirección General de Investigaciones y el Departamento de Ciberseguridad, dependiente de la Dirección de Inteligencia Criminal de la Policía de la Provincia.
La organización delictiva se dedicaba a vender las motos, producto de robos en la provincia de Buenos Aires. Allí, los desarmaba y los enviaba ocultos en encomiendas que simulaban ser bultos de ropa. Una vez en territorio santiagueño, las unidades eran ensambladas nuevamente y ofrecidas en venta en diversas localidades del interior provincial.
La investigación se inició a partir de ciberpatrullajes en redes sociales y otras fuentes abiertas, mediante técnicas de análisis digital no invasivas. Durante las tareas de monitoreo, los efectivos detectaron perfiles y publicaciones sospechosas que ofrecían motocicletas a precios considerablemente bajos, sin respaldo documental, lo que levantó las primeras alertas.
En la tarde de hoy, y como resultado de allanamientos y registros realizados en inmuebles ubicados en la localidad de Weisburd, departamento Moreno, se procedió a la detención de tres hombres mayores de edad. Los cuales fueron alojados en la Subcomisaría de Weisburd, quedando a disposición de la Justicia.
La medida fue ordenada por la Unidad Fiscal de la Circunscripción Capital a cargo de la Dra. Celia Inés Mussi. Entre los elementos secuestrados se encuentran catorce motocicletas de distintas marcas, entre ellas Bajaj, Gilera, Dominar, Honda, Motomel y KTM. Varios rodados presentaban numeraciones de motor y cuadro adulteradas o regrabadas con elementos abrasivos, otros carecían de documentación y dominios, o bien estos resultaban apócrifos, configurando así diferentes irregularidades legales.
Todos los vehículos fueron puestos a disposición de la Fiscalía interviniente, con el objetivo de determinar su procedencia, verificar su autenticidad, establecer su trazabilidad y continuar con la identificación de más posibles implicados en esta red delictiva.