Tras más de dos semanas de intensa investigación, el trabajo mancomunado entre el Departamento Homicidios y Delitos Complejos con la Policía de Tucumán, permitió la detención del principal acusado del brutal homicidio de “Paco” Frías y del intento de asesinato de un joven de 19 años ocurrido en el paraje Viñal Pozo, departamento Pellegrini, a 10 kilómetros de Nueva Esperanza.
El hecho se produjo el pasado 29 de abril cuando, según los primeros informes, un hombre efectuó dos disparos con una escopeta contra un grupo de personas que recolectaban leña en una finca rural. Frías murió en el acto, mientras que el joven Lautaro Prado resultó herido de gravedad. El atacante escapó por zona montuosa, y desde ese momento, fue intensamente buscado.
La investigación fue dirigida por los fiscales Norma Matach y Miguel Torresi, quienes habilitaron al Departamento de Homicidios y Delitos Complejos a operar bajo hipótesis que se encuentran siendo analizadas por la División Análisis de la Conducta y Perfilación Criminal -cuya área cuenta con diversos profesionales especializados en la materia- con el objeto de determinar las causas que derivaron en el hecho sangriento.
Desde el primer día, personal policial desplegó drones, perros rastreadores y numerosos operativos en campos de Nueva Esperanza y Vinal Pozo, pero sin éxito. Posteriormente, surgió información de que el presunto autor se había refugiado en Tucumán, con ayuda de familiares.
Gracias al trabajo conjunto con la División de Homicidios de esa provincia, ayer por la tarde, el prófugo fue localizado caminando por avenida Roca y 9 de Julio, vestido con ropa deportiva. Fue identificado como Carlos Alberto Risso Patrón, quien ya tenía una causa previa por tentativa de homicidio en 2020.
Risso Patrón permanece detenido en una dependencia de la policía tucumana, a la espera de ser trasladado a Santiago del Estero para continuar con las diligencias judiciales por homicidio y tentativa de homicidio.
