
Este domingo, el Servicio de Seguridad de Ucrania anunció tres ataques simultáneos a bases aéreas rusas. Los mismos impactaron en varios aviones estratégicos del Kremlin en tres aeródromos de Murkmansk e Irkutsk (Siberia).
En paralelo, Rusia bombardeaba territorio ucraniano con misiles y drones. Todo, un día antes de que ambas partes se reúnan para una nueva ronda de conversaciones de paz directas en Estambul.
El de Ucrania es un ataque sin precedentes desde el inicio de la invasión rusa. Llevaba 18 meses en preparación bajo el nombre en clave de “Telaraña”, de acuerdo a fuentes de Ucrania. Estiman que más de 40 aviones rusos fueron destruidos tras el operativo.
Fue el mismo presidente Vladimir Zelensky quien supervisó el procedimiento ideado por el jefe del Servicio, Vasil Maliuk y su equipo, según declaraciones de autoridades de seguridad a la agencia Interfax.
Ataque con drones
Para la operación planificada por ucrania se transportaron drones en camiones cargados con contenedores hasta lo profundo del territorio ruso, según indicó un funcionario del Gobierno de Zelensky.
Los drones habría alcanzadon 41 aviones estacionados en varios aeródromos el domingo por la tarde, incluidos A-50 , Tu-95 y Tu-22M. Moscú utilizó previamente los bombarderos de largo alcance Tupolev Tu-95 y Tu-22 para lanzar misiles a Ucrania, mientras que los A-50 se utilizan para coordinar objetivos y detectar defensas aéreas y misiles guiados.
El Ministerio de Defensa de Rusia, por su parte confirmó los ataques, que abarcaron cinco aeropuertos. Los drones FPV dañaron aeronaves y provocaron incendios en bases aéreas en la región de Irkutsk, a más de cuatro mil kilómetros de Ucrania, así como en Murmansk, en el norte de Rusia, indicó. Rusia repelió otros ataques en Amur en el Lejano Oriente ruso y en las regiones occidentales de Ivanovo y Ryazan, dijo el ministerio.