
Tras la decisión de la Corte Suprema que dejó firme la condena en su contra en la causa Vialidad y la inhabilitó de por vida para ejercer cargos públicos, Cristina Fernández de Kirchner brindó un fuerte discurso desde la sede del PJ Nacional. Acompañada por militantes y referentes de su espacio, la ex presidenta calificó el fallo como parte de un “cepo al voto popular” y denunció una avanzada del “partido judicial” en beneficio del actual gobierno.
Dirigiéndose directamente a los jueces de la Corte, los tildó de “monigotes” y sostuvo que responden a “mandos naturales” del poder económico. Según su análisis, el fallo busca impedir su participación electoral luego de haber anunciado una eventual candidatura en la provincia de Buenos Aires. “Un mes antes de la oficialización de candidaturas sacan este fallo”, subrayó, relacionándolo con la posibilidad de un nuevo avance del kirchnerismo.
Durante su mensaje, recordó momentos previos a la elección de 2019, cuando renunció a ser candidata presidencial para apoyar a Alberto Fernández. “Hice lo que había que hacer para que el partido gane las elecciones”, expresó. También afirmó que el fallo judicial intenta bloquear cualquier alternativa futura del espacio nacional y popular frente a un gobierno que, según dijo, “no tiene final feliz”.
Cristina Kirchner también apuntó contra referentes del oficialismo actual y de gestiones anteriores, como Mauricio Macri y Federico Sturzenegger, a quienes acusó de corrupción sin haber sido juzgados. “La paradoja es que ellos están en libertad, y yo, condenada”, sostuvo, y afirmó que su sentencia es “un certificado de dignidad política”.
Para cerrar, agradeció el apoyo de militantes y dirigentes y expresó su convicción de que el peronismo volverá a encabezar un proyecto con justicia social. “Podrán meterme presa, pero el pueblo no se resigna”, afirmó. Luego, anunció que regresará a su casa tras sus actividades en el PJ.