WhatsApp anunció el mayor (y el peor) cambio de su historia: publicidades y cobros

WhatsApp, la aplicación de mensajería más utilizada en el mundo, anunció el lanzamiento de tres nuevas funciones comerciales para su pestaña de Novedades. Entre ellas, se destacan los anuncios en los estados, los canales promocionados y la posibilidad de suscribirse a canales de pago.

Con más de 1.500 millones de usuarios diarios interactuando con esta sección, la plataforma —propiedad de Meta— busca convertir ese espacio en una fuente de ingresos sin alterar la experiencia de mensajería privada que caracteriza a la app.

Más negocios, más visibilidad

Según explicó Alice Newton-Rex, vicepresidenta de Producto de WhatsApp, la intención es “ayudar a las personas a encontrar negocios directamente dentro de la aplicación” y “crear valor sin interferir con los chats personales”, ya que todo ocurre en la pestaña separada de Novedades.

Estas nuevas herramientas comenzarán a implementarse de forma global en los próximos meses.

¿Qué cambia con estas funciones?

Canales promocionados:
Al ingresar a la sección de exploración de canales, los usuarios verán sugerencias de canales que hayan pautado para aparecer en esa lista. Esto permitirá que las marcas o figuras públicas promocionen sus espacios para ganar seguidores.

Anuncios en los estados:
WhatsApp comenzará a mostrar publicidad mientras los usuarios visualicen los estados de sus contactos, en un formato similar al de las stories de Instagram. La novedad marca un antes y un después: es la primera vez que habrá anuncios dentro de la app misma, no redirigidos desde Facebook o Instagram.

Los anuncios estarán segmentados según la ubicación, idioma y la interacción previa de cada usuario.

Suscripciones a canales:
Algunos administradores podrán ofrecer contenido exclusivo mediante suscripciones mensuales. Los valores serán fijos y definidos por el creador del canal, y WhatsApp no cobrará comisión (aunque sí lo harán Apple y Google por el uso de sus tiendas de apps).

Esta función comenzará con un grupo limitado de usuarios y apunta a monetizar el engagement de seguidores fieles.

¿Y la privacidad?

WhatsApp aclaró que los canales no cuentan con cifrado de extremo a extremo, ya que el contenido debe cumplir normas de comunidad y puede ser revisado. Sin embargo, los chats personales, llamadas y archivos enviados entre contactos siguen protegidos con cifrado de extremo a extremo, como siempre.

Con esta jugada, WhatsApp entra de lleno en el terreno de la monetización interna, imitando modelos de otras redes sociales, pero conservando —por ahora— su promesa de mantener los chats privados sin publicidad. Una movida que marca el inicio de una nueva etapa para la app más popular del mundo.