
El mundo del deporte extremo y la televisión española se encuentra de luto tras la trágica muerte de Marta Jiménez, reconocida atleta de alto riesgo y colaboradora del programa El Hormiguero, quien falleció el sábado 13 de julio mientras practicaba salto base en la zona de Punta Calva, en el valle de Chistau (Huesca). Tenía 34 años.
El accidente ocurrió alrededor de las 10:30 de la mañana, según informó la Guardia Civil. Jiménez realizaba un salto desde una cresta montañosa, una práctica que conocía a la perfección pero que, en esta ocasión, tuvo un desenlace fatal. Hasta el lugar acudieron equipos del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de Boltaña, la Unidad Aérea de Benasque y personal sanitario del 061, quienes solo pudieron confirmar su fallecimiento debido a las graves lesiones sufridas. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Huesca.
Aunque aún se desconocen las causas exactas del siniestro, este se suma a una preocupante lista de incidentes mortales registrados en el medio natural aragonés, donde ya se contabilizan nueve víctimas en lo que va del año por accidentes en actividades de aventura. El salto base, una de las disciplinas más extremas del mundo, figura entre las más peligrosas.
Conocida como la “Mujer Adrenalina”, Marta Jiménez alcanzó notoriedad por su participación en El Hormiguero, programa en el que debutó en octubre pasado con un salto base desde una grúa de 60 metros. Su energía, valentía y autenticidad la convirtieron rápidamente en una de las favoritas del público. Su última aparición fue el 19 de junio, cuando realizó una demostración de wakesurf sobre una piscina inflable impulsada por un cuatriciclo.
Más allá de la televisión, Marta tenía una trayectoria sólida en el universo de los deportes extremos. Era ingeniera química y fundadora de High Jump, una empresa especializada en actividades como puenting, bungee y rope jump. Fue pionera en técnicas innovadoras como el rope jump —saltos desde paredes verticales con sistemas de cuerdas— y el paraalpinismo, que combina escalada con saltos desde cumbres. En su carrera acumulaba más de 390 saltos base y organizaba expediciones y entrenamientos desde su residencia en Sobrarbe.
En entrevistas, describía el momento previo al salto como un instante único: “Entro en un estado de meditación muy activa. Estás en ese punto, y no hay nada más”. Su pasión era absoluta, y su vida entera estuvo marcada por el deseo de desafiar los límites con disciplina y entusiasmo.
La noticia de su muerte generó una profunda conmoción en redes sociales, donde seguidores, colegas y figuras públicas expresaron su dolor y admiración. Desde El Hormiguero, el conductor Pablo Motos despidió a Marta con un emotivo mensaje: “Se nos ha ido Marta. La mujer adrenalina. Ha perdido la vida haciendo lo que más amaba. Estamos desolados, pero la recordaremos siempre con una sonrisa, gritando de alegría por haber logrado lo imposible”.
La partida de Marta Jiménez deja un vacío inmenso en el mundo del deporte extremo, pero también un legado de coraje, entrega y amor por la vida en su forma más intensa.