El Centro de Atención a la Vida Naciente Grávida celebró su 15° aniversario en la ciudad de Añatuya, conmemorando un camino de acompañamiento, contención y esperanza para mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad.
Desde su fundación, Grávida se dedica a brindar asistencia integral a madres desde la gestación y durante los primeros años de vida de sus hijos, promoviendo una maternidad positiva y fortaleciendo el vínculo madre-bebé. La tarea se sostiene gracias al trabajo de voluntarios, donantes y diversas instituciones de la comunidad diocesana, que comparten la misión de proteger y cuidar la vida desde la concepción.
Durante la celebración, se destacó la importancia de “escuchar, abrazar y acompañar con ternura” a cada mujer, más allá de sus circunstancias, reafirmando que cada embarazo acompañado con amor es un acto de esperanza y cada madre contenida es un milagro silencioso.
“Que este aniversario sea también un impulso. Que nunca se apague la llama de la empatía, la fuerza del compromiso y la alegría de servir”, expresaron desde la organización al agradecer la presencia y el apoyo constante de quienes hacen posible esta misión.
