No fue el arranque esperado para Franco Colapinto en el GP de Bélgica, 13ª fecha de F1. El piloto argentino vivió dos semanas de trabajo intenso con el equipo Alpine en la base de Enstone desde el pasado Gran Premio de Gran Bretaña para tratar de endurecer las partes más vulnerables de su A525. Sin embargo, en el único entrenamiento pautado para el fin de semana con carrera sprint, el ex-Williams quedó penúltimo.
Colapinto comenzó la tanda con neumáticos duros, como casi toda la parrilla y tuvo un momento de zozobra al pasarse de largo en la primera curva. Luego, fue el primero en poner los blandos para simular clasificación. Recién en la sexta vuelta con la cubierta roja Franco logró su mejor registro de 1m44s847, tiempo que lo puso entre los diez de adelante por un buen rato. Pero claro, todo cambió cuando el resto fue por el caucho más veloz.
Todos comenzaron a mejorar sus marcas y el piloto de Alpine cayó en el clasificador hasta el penúltimo puesto (a 2s825 de Oscar Piastri, el más veloz), que hubiera sido el último de no ser por el error de Oliver Bearman en su giro veloz. El inglés tenía mejores parciales que Colapinto, pero se despistó y no logró cerrar su vuelta.
En Alpine ya sabían que Spa-Francorchamps sería una pista complicada para las debilidades de su auto, porque se trata de un trazado muy veloz, de baja carga. Y el motor Renault empuja poco. Por eso, Pierre Gasly quedó 17º (Yuki Tsunoda se ubicó entre los dos autos franceses), lejos de la punta. El problema para Colapinto es que quedó a casi un segundo de su compañero (918 milésimas).
La próxima salida en Bélgica será para la clasificación del sprint, la carrera corta que se disputará este sábado.
