
En los últimos días, el grupo de diputados que desertaron del bloque de La Libertad Avanza se mostraron junto a gobernadores del PJ no alineados con el kirchnerismo. Se trata de los legisladores Carlos D’ alessandro, Marcela Pagano, Gerardo Gonzáles y Lourdes Arrieta, quienes conformaron el espacio “Coherencia” en la Cámara baja.
Los diputados mantuvieron un encuentro con los gobernadores Gustavo Sáenz (Salta) y Ricardo Quintela (La Rioja), quienes, se sabe, están enfrentados con Cristina Kirchner. Incluso, en su momento el riojano intentó disputarle la conducción del PJ a la expresidenta.
El acercamiento de los libertarios díscolos con los mandatarios del PJ se da tal vez en el momento más complicado para el Gobierno de Milei, y no solo en el Congreso.
El primer mandatario salteño había deslizado tiempo atrás: “La lealtad es una avenida de ida y de vuelta, no es unilateral. Algunos funcionarios del Gobierno nacional fingen demencia a la hora de cumplir con la palabra empeñada y terminan convirtiéndose en palomas de Iglesia. Equilibrio fiscal, institucional y social: ese es el verdadero triángulo de hierro”.
Los exlibertarios decidieron buscar alternativas partidarias por sendas diferencias internas con la conducción del bloque y debido a los últimos escándalos que salpican al a la cúpula, de los cuales no quieren ser parte. Y ahora, desde su propia banca, comenzaron a tejer relaciones con otros grupos de la oposición.
El encuentro con Quintela giró en torno a “la necesidad de defender el federalismo real y el respeto a las provincias frente al centralismo de la Nación”. Buscan así garantizar “una distribución justa de los recursos que fortalezca a las provincias y a los municipios”.
También acordaron aunar esfuerzos para trabajar en pos de las economías regionales y promover la vitivinicultura, la olivicultura, la agroindustria y la producción textil, “generando condiciones de inversión y trabajo genuino”. Además, la intención es potenciar las energías renovables.