
“¡Estoy vivo!”, esas fueron las únicas palabras de un joven que se presentó en su propio velorio. En medio de la conmoción familiar, ahora buscan determinar a quién pertenecía el cuerpo que estaban velando.
El insólito hecho tuvo lugar en Villa Carmela cuando en medio de la despedida apareció el joven. Hubo gritos, desesperación e incertidumbre por conocer la identidad del verdadero difunto.
El jueves, pasadas las 2 de la madrugada, un muchacho se habría arrojado debajo de un camión que transportaba caña en las proximidades del llamado Puente Negro, que está ubicado en la ruta Alternativa que conduce a Alderetes. El fiscal Carlos Sale calificó el hecho como un homicidio culposo, pero todo parecía indicar que el joven se había suicidado.
“La Justicia nos ordenó que hiciéramos los trámite necesarios para poder identificar a esa persona. Después de varias horas de búsqueda, una mujer se presentó en la comisaría de Alderetes para decir que podría tratarse de su hijo”, aseguró Daniel Ruiz, Jefe de la Unidad Regional Este.
“Se hizo el procedimiento de rutina y esta señora, que es oriunda de Villa Carmela, Yerba Buena, lo reconoció”, explicó el funcionario policial.
Al haberse realizado todas las pericias de rigor se ordenó que el cuerpo del joven fuera entregado a sus familiares. Horas después se inició el velorio en la casa familiar del supuesto fallecido.
En medio de la última despedida, el joven se presentó y dijo que estaba vivo. “Hubo lío tremendo. Muchos se espantaron, otros gritaron y lloraron. La verdad es que quedamos helados”, dijo una de las vecinas del “falso difunto”.