
Otra vez una ofrenda invocando espíritus y haciendo pedidos a las “fuerzas del más allá”, sorprendió a los vecinos de la zona norte de la ciudad, a la vera de la Nueva Costanera y del Río Dulce.
“Si es necesario invoco a Exú a que emprenda en contra de los que vienen contra mí”, señala en un fragmento el texto que acompaña una caja con frutas y pochoclo.
A continuación reproducimos la nota que acompaña el ritual:
“Pido abundancia, trabajo, salud y bienestar para toda mi familia y mi entorno.
Pido que toda acción en mi contra sea rechazada y que esa mala energía vuelva en contra de mis enemigos que recurren a Asmodeo, Lucifer, Belial, Samael y Satanás.
Si es necesario invoco a Exú a que emprenda en contra de los que vienen contra mío.
Pido que el expediente judicial de divorcio que se tramita en el juzgado civil solga rápido y que A.D.M. pueda estar conmigo sin ataduras legales y así por fin poder ser una familia.
Pido tener trabajo y buenos ingresos para poder Ofrendar a los Orixás, especialmente a Obatala”