El diputado provincial electo en la provincia de Buenos Aires por La Libertad Avanza accedió a raparse en vivo en el canal de streaming Carajo, donde había surgido la iniciativa. Allí fue “pelado” por un barbero, tal como se había comprometido a hacer en la antesala de las elecciones legislativas si es que lograba un triunfo, como terminó sucediendo.
Diego Santilli había realizado tal promesa frente a el escenario difícil que se le presentaba al partido que conduce el presidente Javier Milei en las semanas previas a los comicios, con la derrota por 14 puntos en las elecciones provinciales del 7 de septiembre como antecedente inmediato. “Si lo damos vuelta me pelo”, había prometido el entonces candidato. El hecho también estaba ligado a un slogan de campaña: dado que en la boleta libertaria en la provincia de Buenos Aires la imagen principal no era la suya si no la de José Luis Espert – quien no tiene cabello y debió declinar su candidatura – Santilli había intentado instalar la frase “para votar al colorado marcá al pelado”.
Santilli llegó a los estudios de Carajo este lunes 27 de octubre acompañado de quienes serán sus compañeros de banca, la diputada electa Karen Reichard y el presidente del bloque en Diputados, Christian Ritondo. La escena reflejó el tono de la jornada para los dirigentes y la militancia libertaria: la alegría por los resultados de las elecciones legislativas se extendió notablemente en las primeras horas de la jornada post electoral. Diego Santilli asumirá su banca el próximo 10 de diciembre, junto a las decenas de diputados y senadores que engrosarán el bloque de La Libertad Avanza en el Congreso.

Sin embargo, no o fue el único que accedió a quedar con el pelo al ras del cuero cabelludo. El conductor de La Misa, Daniel Parisini, conocido como el Gordo Dan, no tardó en hacer lo propio. En pocos minutos, el popular tuitero también lucía sin cabello. Todo el procedimiento estuvo a cargo de otro personaje conocido en las redes sociales: Darío Del Casale, popularizado como el Tano de Il Figaro. Luego de las figuras principales, uno a uno los integrantes del programa fueron ubicándose en el sillón del Tano para proceder a desprenderse por algunas semanas de su cabellera.
