La investigación por la muerte de Karla Robles, la joven de 27 años que se quitó la vida el pasado 24 de octubre en Tucumán, dio un nuevo giro en las últimas horas con la detención de su ex pareja, Ricardo Zerda, por orden de la Unidad Especializada de Homicidios I del Ministerio Público Fiscal (MPF).
El procedimiento fue realizado en el Hospital Obarrio, donde el hombre fue aprehendido mientras avanza la causa que intenta establecer si tuvo algún grado de responsabilidad en la tragedia. Karla había transmitido en vivo su suicidio a través de TikTok, un hecho que conmocionó al país y encendió las alarmas sobre el presunto hostigamiento que sufría.
El fiscal Pedro Gallo confirmó que continúan las pericias sobre teléfonos celulares y redes sociales que podrían aportar información clave para reconstruir las últimas horas de la joven. También se tomaron declaraciones a testigos y vecinos, mientras se indagan posibles antecedentes de violencia de género en la relación.
El abogado Augusto Avellaneda, representante de la familia de Karla, recordó que la víctima ya había denunciado a Zerda en 2022 por violencia de género, y que pese a las medidas de protección dictadas, el agresor habría incumplido las restricciones sin mayores consecuencias judiciales. “Pedimos su detención por desobedecer una orden, pero la Justicia sólo aplicó una advertencia”, señaló el letrado.
Tras la difusión del caso, otras mujeres se animaron a denunciar públicamente situaciones similares con el mismo hombre. En uno de sus últimos mensajes, Karla habría expresado: “Prefiero matarme antes de que él mate a mi mamá y a mi hermano”. Una frase que hoy resuena con fuerza mientras la Justicia intenta esclarecer si detrás de su decisión hubo una historia de violencia y desesperación.
