Un grupo de emprendedores santiagueños reveló a Info del Estero un nuevo modus operandi con el que fueron embaucados. Ocurre que, un grupo de personas que se presenta como clientes, solicitan en alquiler equipos de alto valor económico, pero luego no se los devuelven y los empeñan.
Nahir Dayub, Rosa Mansilla y Fiama Álvarez son tres de los diez damnificados por esta modalidad de estafa que los llevó a perder mucho dinero. Y es que no logran recuperar sus bienes arrendados, entre los que se cuentan freidoras, una PlayStation, una lomiteras, panchukeras.
Los primeros casos se remontan al mes de abril, cuando María Belén Martínez, una de las emprendedoras le alquiló una freidora de 33 lt., una garrafa de 15 kg. y una cartelera a una mujer identificada como Ana Mariel Ovejero. El contrato firmado era por tres meses en los que la clienta abonaría $10.000 por día.
Sin embargo, pasado el plazo e incumplido el acuerdo, por parte de la locataria, Martínez comenzó a exigir que le devuelva sus pertenencias, pero solo encontró promesas. Al intentar recuperar los bienes, supo que ni siquiera estaban en el domicilio de Ovejero, por lo que en mayo último, procedió a radicar una denuncia.
Con el correr de los meses y gracias al alcance de las redes sociales, comenzaron a salir a la luz casos similares. Se reportaron diez víctimas hasta el momento, quienes decidieron crear un grupo de WhatsApp para mantenerse al tanto de las denuncias que cada uno intentó hacer por su cuenta.
Al entrar en contacto unos con otros, coincidieron en que son tres personas los presuntos estafadores: Ana y Delia Ovejero y Carlos Peralta, quienes serían parientes. El modo en que fueron embaucados era el mismo: “Una vez que te alquilan lo que vos ofrezcas (cosas de alto valor) las empeñan”, explicaba Nahir, una joven damnificada.
También a ella le dieron una seguidilla de excusas a la hora de devolverle de sus bienes, aunque fue la única que logró recuperarlos. Pues, según indicó, cuando van a cobrar el dinero del alquiler, o bien a retirar sus pertenencias, los locatarios los amenazaron.
Bienes empeñados
Ante la exigencia de una propietaria, una de las mujeres señaladas como estafadora, terminó por dar nombre, apellido y número de teléfono de la persona a la que entregó una freidora en calidad de “empeño”. Se trata de un policía con domicilio en el barrio Campo Contreras de esta ciudad Capital, quien tampoco dio una respuesta satisfactoria a los damnificados.
La dueña de uno de los equipos en cuestión contactó a este oficial y él le dio dos opciones: pagar $250.000 para que le entregara la freidora -monto que además subía por los intereses de los días transcurridos- o reclamar a la persona de quien él recibió el producto.
Esta situación llevó a los locadores a realizar una denuncia ante las autoridades. Sin embargo, tanto en Fiscalía, como en las comisarías, les explicaron que deben enviar una carta documento a Peralta y las Ovejero y recién efectuar la denuncia.
Ahora, los damnificados quieren dar a conocer su situación, a los fines de prevenir a otros emprendedores que ofrecen sus bienes en alquiler. “Nosotros buscamos que esto se ‘viralice’ porque cada vez son más las personas que caen”, comentaba Dayub muy indignada.
