La mañana de Boca tuvo un giro inesperado. Debido a la explosión registrada anoche en el parque industrial de Carlos Spegazzini, en Ezeiza, el acceso al Boca Predio quedó restringido y el plantel de Primera debió modificar su agenda. La práctica se trasladó a Casa Amarilla, donde compartió espacio con la Reserva.
El cambio se da en la víspera del partido ante Tigre, que marcará el cierre del Grupo A del Torneo Clausura. A pesar del contratiempo, Claudio Úbeda aprovechará la jornada para pulir detalles y confirmar el once que viene manejando durante la semana.
Mientras la Reserva se enfoca en los cuartos de final del próximo miércoles ante Instituto, el primer equipo ajusta su preparación de cara al cierre de la fase regular y la pelea en los playoffs. Con la clasificación a octavos y el boleto a la próxima Copa Libertadores ya asegurados, la idea es que juegue la base titular.
Uno de los cambios obligados será la ausencia de Milton Giménez, quien acumula cuatro amarillas y será preservado para evitar una suspensión. Su lugar podría ocuparlo Ander Herrera, lo que permitiría liberar a Exequiel Zeballos en ataque. En defensa, Nicolás Figal continuará sustituyendo a Lautaro Di Lollo, sancionado ante River.
La noticia más esperada por los hinchas llega desde el departamento médico: Edinson Cavani volverá a integrarse a la lista de concentrados. Tras casi dos meses fuera de las canchas por una lesión en el psoas, el uruguayo tiene grandes chances de sumar minutos para recuperar ritmo antes de los octavos de final y convertirse en una alternativa clave en la etapa decisiva del torneo.
Pese a la emergencia que alteró la rutina, Boca no frena su preparación. Con la mira puesta en Tigre y el tramo definitorio del Clausura, Úbeda busca que el equipo llegue afilado y con todas sus variantes disponibles.
