La dura derrota por 5-1 frente a Estados Unidos en Florida encendió todas las alarmas en la selección uruguaya y volvió a poner en duda la continuidad de Marcelo Bielsa como entrenador de la Celeste. El resultado habría profundizado una grieta que desde hace meses atraviesa al plantel y al cuerpo técnico, marcada por diferencias futbolísticas, decisiones polémicas y falta de conexión del DT con algunos referentes.
La relación se habría desgastado a tal punto que actores cercanos al vestuario admiten que “el clima no es el mejor” y que varias decisiones del rosarino generaron malestar. Entre ellas, la ausencia de figuras como Edinson Cavani en su momento, o la no convocatoria de Federico Valverde en la reciente doble fecha FIFA ante México y Estados Unidos.
A esto se suman las explosivas declaraciones de Luis Suárez, quien un mes después de anunciar su retiro de la selección criticó el trato dentro del Complejo y la metodología de Bielsa. Aquellas frases dejaron una herida profunda que, según el exdelantero Carlos Bueno, nunca cicatrizó:
“Desde ese problema, ningún jugador volvió a rendir como antes. Hay futbolistas a los que la selección les pesa y que no funcionan, pero él los sigue llevando y poniendo”, aseguró.
La AUF lo respalda, pero la incertidumbre crece
Tras el golpe en Estados Unidos, desde la Asociación Uruguaya de Fútbol salieron a respaldar públicamente al DT. El director deportivo Jorge Giordano intentó bajar la tensión:
“El resultado nos pegó fuerte, pero veo a Bielsa con fuerza para seguir. Tiene mucha autocrítica y hay que recomponer y continuar”, señaló.
El propio Bielsa, visiblemente afectado, habló de responsabilidad en conferencia de prensa:
“Me siento responsable de todo esto. Lo que sale afectado después de una actuación como la de hoy es la gestión que hago del partido, de los jugadores y de los recursos”, afirmó.
Un ciclo lleno de luces y sombras
El proceso del “Loco” había generado enorme expectativa: la Celeste clasificó al Mundial con una Eliminatoria sólida, venció a Brasil y Argentina (en La Bombonera) y alcanzó el tercer puesto en la Copa América 2024.
Sin embargo, la irregularidad del equipo, algunas decisiones poco entendidas y un desgaste interno que se profundizó con el paso de los meses dejaron al rosarino en una posición delicada.
La AUF lo sostiene, pero el quiebre con parte del plantel y los últimos resultados colocan a Bielsa en una situación límite. Su continuidad, hoy, está en evaluación.
