Este miércoles, dos miembros de la Guardia Nacional de Virginia Occidental resultaron gravemente heridos en un tiroteo ocurrido en el centro de Washington D.C., cerca de la Casa Blanca. El gobernador del Estado, Patrick Morrisey, confirmó la situación crítica de los agentes durante una rueda de prensa.
El incidente se produjo en las inmediaciones de Farragut Square Park, a escasas dos cuadras al norte de la sede presidencial, un área generalmente concurrida por turistas y residentes. La Policía Metropolitana de Washington informó que el lugar ha sido asegurado y que hay un sospechoso detenido. Se estima que se realizaron entre 10 y 15 disparos durante el ataque, que, según fuentes federales, se trató de una emboscada.
Los guardias intercambiaron disparos con el sospechoso antes de ser heridos, y las autoridades confirmaron que él también resultó herido en el enfrentamiento. Aunque su estado no es crítico, fue trasladado a un hospital para recibir atención médica.
El presidente Donald Trump, quien se encontraba en Mar-a-Lago durante el feriado de Acción de Gracias, fue informado del tiroteo. A través de su cuenta en Truth Social, expresó su indignación: “Los animales que dispararon a los dos agentes de Seguridad Nacional, ambos en estado crítico, pagarán un alto precio”. Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, aseguró que el gobierno está monitoreando la situación de cerca.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, también se pronunció sobre el incidente, pidiendo oraciones por la recuperación de los guardias heridos y destacando la colaboración del Departamento de Seguridad Nacional con las autoridades locales. Las investigaciones sobre el suceso continúan mientras la comunidad pide respuestas y justicia.
