Tras una jornada agobiante, la lluvia trajo alivio a la ciudad

Luego de una jornada marcada por una alerta por altas temperaturas y lluvias, en la que la sensación térmica fue sofocante y la temperatura máxima rondó los 40 grados, finalmente llegó el tan esperado alivio a la ciudad.

Durante gran parte del día, el intenso calor y la elevada humedad hicieron sentir con fuerza sus efectos. Sin embargo, alrededor de las 21 horas se produjo un cambio en las condiciones climáticas: comenzó a soplar viento fresco y, minutos más tarde, se desató una lluvia intensa.

Ante este escenario, el SMN había emitido una alerta naranja por tormentas para gran parte del territorio provincial, advirtiendo sobre la posible presencia de fenómenos meteorológicos intensos durante la tarde-noche del domingo y la madrugada del lunes.

Según el pronóstico oficial, las lluvias y tormentas podrían continuar hasta este lunes, con probabilidad de precipitaciones abundantes en cortos períodos, fuertes ráfagas de viento, intensa actividad eléctrica y eventual caída de granizo. Además, se espera un leve descenso de la temperatura tras el avance del frente de tormenta.

Desde los organismos de seguridad se recomienda a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y extremar las precauciones ante posibles complicaciones derivadas de las condiciones climáticas.

Las precipitaciones provocaron un descenso marcado de la temperatura, generando alivio entre los vecinos luego de varias horas de calor extremo. El cambio de tiempo fue celebrado por la comunidad, que encontró en la lluvia un respiro tras una jornada verdaderamente agobiante.

Tras el diluvio, que se extendió apenas por algunos minutos, el Servicio Meteorológico Nacional registra en estos momentos una temperatura de 33.4°, generando una mínima mejoraría  con respecto al calor extremo que se había sentido durante gran parte del día.