La temporada 2025 del fútbol argentino llegó a su fin y dejó confirmado un nuevo cruce de alto voltaje: Rosario Central y Estudiantes de La Plata volverán a verse las caras para disputar la Supercopa Internacional, un mano a mano con un título en juego que ya genera una enorme expectativa.
El rival del Canalla será el Pincha, recientemente consagrado campeón del Trofeo de Campeones, tras vencer 2 a 1 a Platense en el Estadio Único de San Nicolás. Si bien el partido aún no tiene fecha ni sede confirmadas, se estima que podría disputarse en marzo, con Uruguay o Paraguay como posibles escenarios.
Más allá del trofeo en disputa, el cruce tendrá un condimento especial por el contexto reciente entre ambos clubes. Central y Estudiantes se volverán a enfrentar luego del recordado episodio ocurrido semanas atrás en el Gigante de Arroyito, cuando los jugadores del Pincha le dieron la espalda al Canalla durante el pasillo previo al partido por los octavos de final del Torneo Clausura.
El origen de la polémica
La tensión entre ambos clubes se originó luego de que la Liga Profesional reconociera a Rosario Central como campeón de la Liga 2025, por haber sido el equipo que más puntos sumó en la tabla anual. La decisión generó un fuerte debate en el fútbol argentino y provocó posturas enfrentadas.
El presidente de Estudiantes, Juan Sebastián Verón, cuestionó públicamente la legitimidad de ese título, lo que derivó en una respuesta desde la AFA, que recordó que el vicepresidente del Pincha, Pascual Caiella, había avalado la decisión en el comité ejecutivo. Incluso, a través de un boletín oficial, se ordenó que Estudiantes realizara el pasillo de honor a Central en el siguiente enfrentamiento entre ambos.
El día del partido, la escena fue histórica: los futbolistas de Estudiantes formaron el pasillo, pero al momento del ingreso de Central se dieron vuelta, dándole la espalda, en una imagen que quedó marcada en la memoria reciente del fútbol argentino.
El camino del Pincha hasta la consagración
Mientras la polémica se extendía, Estudiantes siguió avanzando en el Torneo Clausura. Tras eliminar a Rosario Central, venció a Central Córdoba en Santiago del Estero, superó a Gimnasia en el clásico platense en el Bosque y accedió a la final frente a Racing, a quien derrotó por penales luego de empatar sobre el final del encuentro.
Ese título le permitió disputar el Trofeo de Campeones ante Platense, campeón del Apertura. En San Nicolás, el Pincha comenzó perdiendo con un gol de Franco Zapiola a los 4 minutos del segundo tiempo, pero la historia cambió con el ingreso de Lucas Alario.
El delantero, que apenas había convertido un gol en el año, fue decisivo: marcó el empate a los 33 minutos y anotó el 2-1 definitivo sobre el cierre del partido, desatando el festejo albirrojo y confirmando a Estudiantes como campeón.
Con este resultado quedó definido el rival de Rosario Central en la Supercopa Internacional, un duelo que se jugará en los próximos meses y que, tras todo lo sucedido, promete ser uno de los partidos más calientes y esperados del calendario.
