Boca Juniors ya definió su postura respecto al futuro de Ander Herrera. La dirigencia xeneize tiene decidido elevarle una propuesta formal para que continúe en el club hasta diciembre de 2026, aunque la resolución final quedará en manos del futbolista, que por estas horas analiza si seguirá un año más en la actividad profesional.
El mediocampista español viajó a España para disfrutar de sus vacaciones y pasar tiempo con su familia luego del cierre de la temporada. Antes de partir, Herrera había anticipado que evaluaría su permanencia en Boca, ya que su contrato finalizó y no fue renovado automáticamente dentro de los plazos establecidos para 2025. Por ese motivo, si continúa, deberá firmar un nuevo vínculo.
En el Xeneize consideran que su experiencia puede ser valiosa de cara al gran objetivo deportivo: la Copa Libertadores, torneo que Herrera todavía no pudo disputar con la camiseta azul y oro. El plan de Juan Román Riquelme es contar con él dentro del plantel 2026, aunque la oferta incluiría ajustes en el salario y posibles cláusulas vinculadas a objetivos y cantidad de partidos jugados, teniendo en cuenta el historial reciente de lesiones.
En medio de las especulaciones, Herrera compartió en redes sociales una imagen junto a sus hijas durante un paseo en España, cubriendo sus rostros con corazones azul y amarillo, un gesto que muchos hinchas interpretaron como un guiño a Boca. Si bien existieron contactos entre el jugador y la dirigencia, hasta el momento fueron informales y sin definiciones concretas.

Desde el club confían en que el vasco acepte renovar al menos por una temporada más. “La idea es que siga”, señalaron desde el entorno dirigencial, aunque reconocen que la decisión final dependerá del propio futbolista, que también contempla la posibilidad de retirarse.
El balance deportivo de Herrera en 2025 no fue favorable. Las constantes lesiones limitaron su participación: de los 44 partidos que disputó Boca en la temporada, el español apenas estuvo presente en 17, lo que representa un 38% del total. Debutó ante Argentino de Monte Maíz, pero poco después sufrió su primera lesión muscular frente a Argentinos Juniors. A partir de allí, las recaídas se repitieron, incluso tras su reaparición en la Libertadores frente a Alianza Lima y en el Torneo Apertura.
Las ausencias lo marginaron de partidos clave, como el Superclásico ante River en el Monumental, y su regreso se dio recién en los cuartos de final del Apertura, donde Boca fue eliminado por Independiente. En el Mundial de Clubes volvió a resentirse ante Benfica y terminó expulsado desde el banco de suplentes. Su tramo más regular se dio entre la fecha 10 y los octavos del Clausura, con ocho partidos consecutivos y buenas actuaciones puntuales, como frente a Tigre y Estudiantes.
A este panorama se suma la incertidumbre sobre el futuro del cuerpo técnico, ya que Claudio Úbeda aún no fue confirmado como entrenador para 2026, aunque en caso de continuar contaría con Herrera en su plantel.
Mientras tanto, en Boca mantienen la expectativa de acercarle una oferta concreta y aguardan la respuesta del español, con la ilusión de que pueda tener revancha y vivir la experiencia completa de la Copa Libertadores con la camiseta xeneize.
