El policía Carlos Javier Gauna, acusado de “homicidio simple con dolo eventual” por el incidente en el que le disparó en la cabeza y ocasionó la muerte de su compañero Gastón Roldán, seguirá detenido después de que la Justicia le dictara la prisión preventiva.
La resolución fue adoptada por la jueza de Control y Garantías, Dra. María Pía Danielsen, durante la audiencia que la misma presidió y se trató la situación de Gauna.
La Magistrada analizó las evidencias con las que cuenta la Fiscalía y los supuestos riesgos procesales que implicarían su libertad, por lo que ordenó que el funcionario policial continúe detenido.
Vale recordar que el disparo mortal tuvo como escenario la Departamental 12 de Policía de Quimilí, departamento Moreno.
El caso
Roldán, un agente de 21 años, había ingresado a la fuerza en 2023. Murió el pasado martes 8 de octubre tras recibir un disparo en el maxilar derecho mientras se encontraba con otros tres compañeros de guardia en la sede policial de Quimilí.
Según las declaraciones de los presentes, el disparo habría ocurrido mientras Gauna manipulaba su arma reglamentaria, sin percatarse de la presencia de un proyectil en la recámara.
La resolución judicial de prisión preventiva se dio a conocer tras la autopsia preliminar, que indicó que el proyectil causó un shock hipovolémico en la víctima.
Pedido
La Fiscalía, a cargo de Mauricio Fabián Abramzuc, solicitó la medida preventiva mientras se avanza en el esclarecimiento de las circunstancias que llevaron a la muerte de Roldán.
La imputación de “homicidio simple con dolo eventual” indica que la justicia considera que el policía Gauna pudo prever las consecuencias fatales de su acción, aunque no tuvo la intención de ocasionar la muerte de su colega.
