Esta semana fue un momento crucial para la familia de Liam Payne. Después de dos semanas de incertidumbre, Geoff Payne, el padre del recordado cantante, finalmente pudo regresar al Reino Unido para darle el último adiós a su hijo. Mientras la familia se prepara para el funeral, el caso dio un nuevo giro este jueves, cuando Roger Nores, empresario y amigo cercano del exintegrante de One Direction, se defendió de las acusaciones de “abandono de persona”.
En declaraciones al Daily Mail, Nores negó haber tenido una actitud negligente hacia Liam, enfatizando el vínculo de aprecio que los unía. “Jamás abandoné a Liam; fui a su hotel tres veces ese día y me fui 40 minutos antes de que esto sucediera. Había más de 15 personas en el lobby del hotel conversando y bromeando con él cuando me fui”, explicó, relatando lo ocurrido la tarde de la tragedia.
Nores también reveló que había brindado su testimonio ante el fiscal el 17 de octubre, apenas un día después de la muerte del cantante. “Lo hice como testigo y desde entonces no he tenido contacto con la policía ni con el fiscal. No era el manager de Liam; él solo era un amigo muy querido. Por favor, remítanse al correo electrónico que envié a Liam y a su equipo el 23 de agosto”, afirmó.
El empresario se mostró visiblemente afectado por la situación: “Estoy realmente devastado por esta tragedia y extraño a mi amigo todos los días. Jamás podría haber imaginado que algo así sucedería”.
