En el marco de la festividad de Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa, el Arzobispo de la Diócesis Primada de Santiago del Estero, monseñor Vicente Bokalic, dio una misa cargada de simbolismo y reflexión. La ceremonia comenzó con un cálido homenaje a un sacerdote que dedicó largos años de servicio en el santuario, quien fue recibido con aplausos por los fieles congregados en el vallecito de Sumampa Viejo.
Antes de oficiar la eucaristía, monseñor se centró en los adultos mayores, un sector de la sociedad que, según el obispo, sufre de abandono y precariedad. Durante su homilía, Bokalic expresó su preocupación por la realidad que enfrentan muchos jubilados, quienes viven con salarios que calificó de “magros”.
“Los adultos mayores no son el descarte de la sociedad”, sentenció y exhortó a las familias y a la comunidad en general a valorar y cuidar a quienes han transitado una vida entera construyendo el presente que hoy disfrutan las nuevas generaciones.
En este sentido, alentó a fomentar el intercambio entre jóvenes y mayores, asegurando que este vínculo no solo enriquece a los más jóvenes con la sabiduría y experiencia de los adultos, sino que también brinda a los mayores el cariño y respeto que merecen.
Bokalic subrayó la importancia de que los adultos mayores se sientan acompañados y escuchados, especialmente en un contexto donde muchas veces son relegados a los márgenes de la sociedad. “Ojalá siempre sientan el cariño de sus familias”, expresó, dejando un llamado a la reflexión para todos los presentes.
De la celebración eucarística participó el intendente de Sumampa, Fernando Bernasconi y el ministro de Gobierno, Marcelo Barbur.
