El metabolismo, ese complejo sistema que determina cómo nuestro cuerpo utiliza la energía, es una pieza clave en la relación entre el ejercicio y la pérdida de peso. Sin embargo, la ciencia moderna ha desafiado muchas ideas tradicionales sobre cómo se comporta este proceso cuando nos ejercitamos.
¿Qué es el metabolismo?
El metabolismo abarca todas las actividades que realizan nuestras células para mantenernos vivos, desde respirar hasta movernos. Se mide en calorías, una unidad de energía. El principal factor que determina cuántas calorías quemamos es el número y tipo de células activas en nuestro cuerpo. Por ejemplo, las células musculares tienden a gastar más energía que las grasas.
¿El ejercicio quema más calorías?
Sorprendentemente, hacer más ejercicio no siempre se traduce en quemar muchas más calorías. Según el modelo de “gasto energético total restringido” desarrollado por el antropólogo Herman Pontzer, nuestros cuerpos tienden a ajustarse cuando hacemos ejercicio regularmente. Esto significa que, aunque el ejercicio quema energía, el cuerpo puede reducir el gasto calórico en otras funciones biológicas para equilibrar el total.
En otras palabras, correr largas distancias o pasar horas en el gimnasio no siempre implica que quememos más calorías de forma sostenida a lo largo del tiempo.
Beneficios del ejercicio más allá de las calorías
A pesar de que el impacto del ejercicio en la quema calórica puede ser limitado, sigue siendo esencial para la salud. La actividad física regular reduce la inflamación, mejora la respuesta al estrés y beneficia al corazón, los músculos y la mente. Estos efectos indirectos pueden ser tan importantes como la pérdida de peso en sí misma.
¿Es posible acelerar el metabolismo?
No existen milagros alimentos ni suplementos que aumenten significativamente el metabolismo. Comer carbohidratos, proteínas o grasas tiene un efecto mínimo en la cantidad de calorías quemadas por día. Incluso actividades mentales intensas, como resolver problemas complejos, no representan un cambio significativo en el gasto calórico.
El metabolismo y la edad
Aunque muchos creen que el metabolismo se ralentiza con la edad, la realidad es que entre los 20 y los 50 años se mantiene relativamente constante, siempre que se controla el tamaño corporal. Las diferencias en el peso a lo largo de los años están más relacionadas con cambios en los hábitos alimenticios y el estrés que con un descenso metabólico.
Conclusión
Para bajar de peso, el ejercicio es solo una parte del rompecabezas. Combinar actividad física regular con una dieta equilibrada y un enfoque consciente hacia la alimentación puede ser la clave para alcanzar y mantener un peso saludable. Además, entienda que el metabolismo está diseñado para mantener un equilibrio energético nos ayuda a replantear nuestras expectativas sobre el ejercicio y la pérdida de peso.