Recientemente, se ha revelado que la que se pensaba era la cascada más alta de China es en realidad una estructura artificial.
Esta cascada, ubicada en la ciudad de Guiyang, había sido presentada como una maravilla natural, atrayendo a numerosos turistas y generando orgullo local. Sin embargo, investigaciones recientes demostraron que el agua proviene de una tubería oculta, y que todo el sistema fue diseñado y construido artificialmente.
Este descubrimiento ha desatado una ola de reacciones en redes sociales, con opiniones divididas entre la admiración por la ingeniería detrás de la cascada y la decepción por la falta de autenticidad.
