La Justicia de Añatuya se encuentra investigando un grave caso de abuso sexual y maltrato infantil en perjuicio de un niño de apenas diez años, que ha generado una profunda conmoción en la comunidad. Ayer, en medio de un estricto hermetismo, se llevó a cabo una cámara Gesell con la presencia del menor, el fiscal Guillermo Farías y la defensora oficial de menores, Dra. Patricia Bentancor.
El niño, hijo de padres separados, quedó bajo el cuidado de su progenitor por razones aún no esclarecidas, mientras que su hermana, de 13 años, está al resguardo de otra familia. Fue precisamente a su hermana a quien la víctima confió que había sido maltratado y abusado, señalando como responsable a su padre. Ante esta denuncia, el hombre fue detenido y será indagado en los próximos días.
Además, el niño habría mencionado que sufrió hechos que involucrarían a otro miembro del entorno familiar. Sin embargo, estos señalamientos están siendo investigados cuidadosamente mientras la Justicia trabaja en la recopilación de pruebas y testimonios.
Entre las próximas medidas, se realizarán pericias psicológicas al acusado y un informe socioambiental de su lugar de residencia, elementos clave para evaluar tanto la situación como el entorno del detenido. Los investigadores también consideran de suma importancia el testimonio de la hermana del menor, quien podría aportar información valiosa.
La Justicia ha tomado medidas para garantizar la contención del niño, entendiendo la delicada situación de vulnerabilidad en la que se encuentra. Mientras tanto, fuentes judiciales anticiparon que esta semana se continuarán llevando adelante nuevas diligencias para avanzar en el caso, confiando en que la investigación está siguiendo el rumbo adecuado.
