La mujer de 34 años que denunció al cirujano Fabián Peláez por presunta trata de personas continúa internada en el Hospital General de Agudos Juan A. Fernández. Se encuentra en plena etapa de recuperación y bajo tratamiento médico y psiquiátrico, luego de haberse arrojado desde un balcón del barrio porteño de Palermo, en un intento de huida.
Según fuentes médicas, la víctima, identificada como M. M., se encuentra consciente pero en estado de shock y conmoción. Fue sometida a una cirugía en los tobillos, donde se le colocaron placas de fijación de acero inoxidable debido a las fracturas sufridas por la caída. Además, permanece en observación con medicación intravenosa y asistencia del equipo de psiquiatría del hospital.
Hasta el momento, M. M. no ha podido declarar ante el fiscal Gerardo Pollicita, quien lleva adelante la causa. Según explicó el funcionario, la mujer no está en condiciones de relatar los hechos ocurridos el pasado lunes, cuando se arrojó desde el primer piso del departamento ubicado en Niceto Vega al 5900. Si su evolución lo permite, se prevé que pueda ampliar su testimonio entre el jueves y el viernes, una vez que supere el postoperatorio y recupere plena conciencia.
Cuando fue ingresada al hospital, presentaba un alto grado de intoxicación con una sustancia aún no detallada por la Justicia. Se esperan los resultados de los exámenes toxicológicos tanto de ella como del cirujano, quien también se encontraba bajo los efectos de drogas en el momento de su detención, aunque en menor medida.
En el marco de la investigación, la Policía Federal allanó el departamento de Peláez y halló diversas sustancias, entre ellas 8,3 gramos de marihuana, 1,9 gramos de tusi (conocida como ‘droga rosa’) y menos de un gramo de cocaína. También encontraron medicamentos, entre ellos ansiolíticos y fármacos para la disfunción eréctil, que fueron enviados a análisis para determinar su composición y posible relación con el caso.
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Por su parte, el acusado declaró que su pareja tenía antecedentes de consumo problemático de alcohol y drogas sintéticas, y que ya había protagonizado un episodio similar en el pasado. La fiscalía deberá reconstruir la dinámica de la relación y esclarecer lo sucedido en la noche del hecho para determinar si efectivamente existió un caso de trata de personas y explotación.
La causa sigue en curso, mientras la Justicia espera la declaración de la víctima para avanzar en el esclarecimiento del caso.